Dice Julio Zhang que “en España no hay ningún chino cocinando así”. Se refiere a recetas como su sopa agripicante de hongos y rabo de toro preparada al estilo Sichuan, que requiere de un tiempo y una dedicación que pocas cocinas pueden permitirse hoy en día. Desde que trasladara su cocina al barrio de Chamberí hace ahora un par de años, “la última sensación de los fogones capitalinos” ha seguido conquistando paladares mediante la sorpresa. Ningún comensal sabe lo que va a comer hasta que el plato no llega a la mesa.
Soy Kitchen es sinónimo de experiencia, y la clave es dejarse llevar por el imaginario de este reconocido cocinero que instaló en Madrid su cocina imperial china dándole un sentido más amplio al concepto de ‘cocina de autor’. La mente creativa de Julio revolucionó lo que por entonces considerábamos cocina asiática a partir de su maestría para mezclar sabores de Tailandia, Japón, Malasia, Singapur, China, Corea, Perú y España. Después de este tiempo, el chef se encuentra más a gusto que nunca con una cocina imaginativa, libre y en continua reinvención, que da lugar a platos complejos, insólitos y estéticamente irresistibles, en los que el juego de texturas y la diversidad de sabores están siempre presentes.