La hija del aire, de Calderón de la Barca, se ha llevado a escena en contadas ocasiones destacando el montaje dirigido por Lluis Pasqual con Ana Belén hace ya más de 30 años y el de Mario Gas en 2004 interpretado por Blanca Portillo. Ahora llega una nueva producción con Mario Gas, adaptada por el novelista, ensayista y poeta Benjamín Prado. La siempre brillante actriz Marta Poveda se mete en la piel de la seductora Semíramis, reina de Asiria y fundadora de Babilonia, una mujer astuta y guerrera cuya existencia siempre ha transcurrido bajo el signo de la violencia y es acusada de usurpar el poder que debía ser ejercido por su hijo Ninias.